Esta oración se le reza a San Lázaro, sincretizado en el orisha Babalu Aye para alejar los peligros:
Glorioso patrón de los pobres, que en tantos tormentos me veo, con solo llamando tu espíritu me des lo que yo deseo, y que encuentre que mis males sean remediados con solo decir esta oración:
En el nombre de San Lázaro, que los buenos espíritus me ayuden y que vengan en mi auxilio, cuando yo padezca de algún mal o este en algún peligro que me los detengas, y que a mi no lleguen. Que esto me sirva como una prueba de tu protección hacia mi y haz, San Lázaro que tu espíritu sea mi fe y todo el que a mi lado estuviere, en ti encuentre la fuerza que necesita mi materia para poder llevar estas pruebas de este planeta en que habitamos y de este camino que hay que pasar, mandado por Dios, nuestro padre. En ti pongo mi fe para que me salves de esta situación, des consuelo a mis grandes males y que por tu valor tenga otro porvenir mejor a este que tengo. Que en el nombre de San Lázaro los espíritus malos se alejen de mi para siempre con solo decir esta oración.
San Lázaro conmigo y yo con el; el delante, yo detrás de él, para que todos mis males los haga desaparecer, la gloria de todos.
Amen.
El que esta oración tuviere, todos sus atrasos perdiere, y a los veinte días vendrá el patrón en sueños a indicarle en lo que ha de tener su suerte. Si fe tuviere en el, se salvara también.